Los bodegones son la última tendencia gourmet decorativa y encajan en todo tipo de bodas.

ShowcookingLa personalización de las bodas y eventos cada vez tiene más fuerza, ya sea para plasmar a la pareja en la celebración, para hacer algo diferente para tus invitados o incluso en el ámbito de empresa para captar la atención de un cliente o potenciar tu marca. Cualquier razón es buena.

Hay muchos elementos que nos pueden ayudar a crear un espacio único, desde pacas de paja, jaulas o farolillos voladores hasta carritos gourmet.

¿Por qué escoger bodegones y carritos en lugar de un aperitivo normal?

Es cierto que el Laurel trabaja mucho sus propuestas de aperitivos y menús, pero también hay que considerar que están basadas en gustos más estándar que puedan encajar con todas las parejas. No hace falta renunciar al cóctel de bienvenida tradicional, tal solo con cambiar dos o tres aperitivos por «stands» será suficiente para dar ese toque tal especial.  De esta manera además, podrás aprovechar alguna vista o rincón de manera natural, haciendo que los invitados, por ejemplo, acudan a la bicicleta de las cervezas que está bajo un árbol centenario, lugar que quizá con el cóctel no sería visitado, o al menos no con tanta fluidez.

La Capilla

Hay parejas que los utilizan para un momento determinado en el cóctel de bienvenida, hay otras que lo mantienen durante una cena tipo cóctel e incluso hay quienes celebran la boda con un menú basado exclusivamente en buffets de carritos y bodegones.

¿Cuáles son los pros de utilizarlos?

  • Ayudan a aprovechar todos los rincones y vistas. En ocasiones hay lugares de la finca que están apartados, o contamos con mucho espacio y no sabemos como hacer que los invitados la recorran. Esta es la mejor manera
  • Encajan con todo tipo de boda. Al fin y al cabo su función real es una mesa con comida, así que es muy fácil cambiar la decoración del carrito o bodegón para que se ajuste a una boda urbana, vintage, rústica…
  • Son doblemente personalizables. La apariencia y, por supuesto, lo que se sirve. Por ejemplo, una mesita de comida mejicana porque os recuerda a aquel restaurante donde celebrasteis el primer aniversario, o una barquita de ceviche porque vuestra luna de miel será en Perú…
  • Refuerzan el menú. Algunas de las opciones son platos más contundentes que el resto de aperitivos que podemos elegir si queremos hacer del menú algo más contundente.
  • Son muy económicos. El precio  (también dependiendo de qué se sirva) generalmente es muy razonable teniendo en cuenta que es una forma de «vestir» la finca. Comprar decoraciones similares tú misma salen posiblemente más caras que contratando un carrito o bodegón.