A diferencia de lo que sucede en las bodas celebradas por la iglesia, donde el protocolo para esas bodas es muy estricto, en las bodas civiles es la propia pareja la que fija las reglas a seguir, siendo por lo tanto bodas mucho más flexibles.

Hay que tener en cuenta que cuando nos referimos a boda civil, hablamos de la ceremonia que tendrá lugar junto con a los invitados el día de la boda, no al momento en el que se firman los papeles en el juzgado o registro civil (aunque sea éste el que realmente cause efectos legales).
Aprende más sobre protocolo para bodas y descárgate nuestra guía gratuita El protocolo en una boda:
Cierto es que no siempre es necesario acudir a un juzgado antes de la boda para firmar los papeles de matrimonio y celebrar la ceremonia “real”, sino que siempre que una persona con potestad para hacerlo acceda a oficiar la ceremonia esta podrá tener lugar el día de la boda en el sitio que más ilusión haga a los novios.

Las entradas

En primer lugar, entrarán en la ceremonia de la boda civil el novio con la madrina, que se situarán frente al altar. Para ambientar la entrada lo habitual es que suene música, pudiendo ser menos clásica y formal que en las bodas religiosas, por tanto se permite mayor número de posibilidades en este tipo de ceremonias.
En las ceremonias civiles, a diferencia de lo que sucede con las religiosas, la música no está condicionada a la liturgia, por lo que se pueden incluir piezas de un repertorio más moderno. No obstante, muchas parejas siguen considerando igualmente la opción de incluir música clásica para dar ambiente a la ceremonia.
Posteriormente, entrarán todos los invitados que tomarán asiento bien detrás de la novia si vienen de parte de ésta, o en caso contrario se situarán detrás del novio.
Finalmente llega el momento más esperado: la entrada de la novia del brazo de su padre, con música de fondo, no siendo necesario en este caso ir del brazo izquierdo de su padre, tal y como sucede en las bodas religiosas.

La ceremonia civil

El oficiante en un primer momento hará las presentaciones correspondientes y dedicará un saludo a los invitados.
Seguidamente se harán varias lecturas por parte de los invitados, aunque no conviene que sean más de tres lecturas, ya que puede resultar algo repetitivo, y cada lectura debería tener un máximo de 20 líneas.
Una vez finalizadas las lecturas, el oficiante leerá en voz alta los artículos correspondientes del código civil con música de fondo para amenizar la lectura, seguido si se quiere de alguna última lectura por parte de los invitados.
En último lugar el oficiante preguntará a cada uno de los miembros de la pareja si se quiere contraer matrimonio con esa persona y en caso afirmativo se procederá al intercambio de anillos y se les declarará marido y mujer.

Las salidas

Tampoco existe un riguroso protocolo en cuanto al orden de salida de los novios e invitados, aunque lo habitual viene a ser que primero lo hagan los novios, seguidos por los padrinos, posteriormente por los invitados más cercanos. Finalmente, una vez ha salido todo el mundo del lugar de la celebración se procederá a dar la enhorabuena a la pareja en persona.
Las bodas civiles por lo tanto dan más juego a la pareja, al flexibilizarse el protocolo, pudiendo elegir la música que más les apetece, haciendo las entradas y las salidas sin un orden riguroso y leyendo aquellos fragmentos que más les conmueven.
Si estás interesada en el tema del protocolo para bodas, no te pierdas estos artículos de nuestro blog:

También puedes consultar nuestra colección de guías gratuitas sobre la preparación de una boda. En ella encontraras guías para temas como la decoración de mesas de una boda o originales y divertidas ideas para organizar tu boda. Y recuerda que el Catering Laurel está especializado en catering para bodas con encanto, ya sean en Madrid como alrededores. Cada detalle cuenta para nosotros. Y si aún no has encontrado dónde celebrar este día tan especial puedes elegir entra todas las fincas para bodas que trabajamos con nuestros tan especiales caterings.